“Scenes and Splitscreen”: el disco debut de The Arcade Kids
La banda británica de synthpop combina lo analógico y la nostalgia para canalizar el amor y el desamor.
Por Sara Fernández
The Arcade Kids, el grupo británico compuesto por Phil Owst (productor) y Teddy Pester (vocalista/letrista), fusiona la estética vintage de los 80’s con una fresca profundidad emocional. Su música no solo revisita el pasado, sino que lo refleja a través de las vulnerabilidades y las complicaciones de la vida moderna.
Scenes and Splitscreen es su primer álbum de estudio y combina sintetizadores potentes, guitarras brillantes, líneas de saxofón sensuales y voces exquisitas para crear un sonido atemporal que recuerda a películas clásicas de los 80’s, como “The Breakfast Club” y “Dirty Dancing”.
La tapa de Scenes and Splitscreen, el primer álbum de estudio de The Arcade Kids
Este material trata sobre el anhelo, el dolor y de lo que podría haber sido una relación. “Queríamos escribir canciones que se sintieran como si vibraran en los altavoces de un tren de medianoche o como si resonaran en el último baile de un romance fracasado”, expresaron sobre Scenes and Splitscreen.
Todo inicia con “Boot Sequence”, como si estuvieras dentro de un videojuego. A continuación suena “Close Your Eyes”, que tranquilamente podría sonar en uno de esos filmes para adolescentes como “Pretty in Pink”.
Como un “Romeo y Julieta” vintage aparece “You Don’t Feel the Same”, para darle lugar a la melancólica balada "Lost", con la vibrante voz de la vocalista invitada LAU y un solo de saxofón que evoca la soledad de sentirse perdido tras una relación rota.
Con un sonido de guitarra alegre, aparece un tema no tan feliz: “I Will Let You Know”. Mientras que “Remember Me” hace reflotar los sentimientos por una persona que fue importante: “Brindemos por lo que pudo haber sido/ Quizás eventualmente/ Bueno, creo que todavía pienso en ti/ ¿Te acuerdas de mí?”.
"Waiting On You" habla no querer perder la relación y el miedo que eso causa, además combina baterías retro naturales y sintetizadores de ensueño. Por último, “Gone In A Moment” representa el no poder hacer nada frente a la realidad de no tener más a la “persona indicada”.
En total, el disco dura casi media hora y las reflexiones que deja son muchas, sin perder la esperanza con un sonido alegre.
The Arcade Kids ha ganado un gran número de seguidores gracias a BBC Introducing y Spotify, y ahora están listos para reintroducir el synthpop a una nueva generación, no como un eco nostálgico, sino como un sonido vivo y actual.